Según un nuevo informe, la ansiedad por resaca es un fenómeno legítimo que puede afectar directamente el estado de ánimo de las personas junto con los síntomas físicos de la resaca.

El informe de Unilad dice que la "ansiedad" ocurre cuando los efectos sedantes del alcohol desaparecen, causando síntomas de abstinencia similares a los que experimentan las personas que dependen del alcohol.

"Estos síntomas pueden ser psicológicos, como sentirse deprimido o ansioso, y muchas personas sienten los efectos de esto la mañana después de beber alcohol porque se están absteniendo de sus efectos", dice el informe.

"Los pensamientos molestos en el fondo de tu mente siguen siendo los mismos: '¿Me avergoncé anoche?' '¿Dije algo estúpido?' '¿Qué pasa si me peleo? ¿Con todos?' 'Oh Dios, apuesto a que todos me odian'".

Unilad dice que esta ansiedad puede ser tan debilitante que es motivo suficiente para que las personas dejen de beber alcohol por completo.

Entre ellos se encuentra Millie Gooch, de 28 años, de Londres, quien el año pasado fundó Sober Girl Society, según Unilad.

"Me di cuenta de que me estaba metiendo en un ciclo de sentirme un poco mal, salir de fiesta para sentirme mejor, sentirme aún peor y hacerlo una y otra vez", dice.

"En una resaca clásica siempre sufría de 'El Miedo', preocupándome por lo que había dicho o hecho. Con frecuencia experimentaba desmayos y recuerdos confusos cuando bebía, así que eso nunca ayudó a mejorar la situación".< /p>

En declaraciones a Unilad, la psicóloga conductual Jo Hemmings describió la ansiedad como "una combinación miserable de beber demasiado el día anterior, junto con sentimientos de estrés, preocupación y culpa por lo que realmente hicimos o dijimos".

"A medida que el alcohol abandona el cuerpo durante la noche, también agota los niveles de serotonina, la sustancia química que regula nuestro estado de ánimo, por lo que es posible que te sientas aún más estresado al día siguiente", dice.

Puedes leer el informe completo de Unilad aquí.